domingo, 13 de junio de 2010

LA GRAMATICA Y LA ENSEÑANZA DE LA LENGUA

Los nuevos estudios sobre la enseñanza de la lengua nos marcan otras formas o enfoques de la enseñanza de la lengua. aunque como docente tenemos muchas prácticas treadicionales que aun consrvamos y que no ayudan a los niños a desarrollar sus competencias en este campo de su formación, ya que generalmente estan diseñadas a la aplicación de reglas gramaticales, verbos en desuso, reglas ortograficas, etc. En lugar de enseñar el lenguaje oral y escrito de forma práctica, o sea enseñar a leer leyendo y enseñar a escribir escribiendo... y no pretender enseñar el lenguaje a través de la memorización de reglas y definiciones, con lo que se convertia en un estudio de la gramatica y no como lo que hoy en día se pretende que sea, un verdadero aprendizaje del lenguaje oral y escrito.

lunes, 7 de junio de 2010

ACTIVIDAD FINAL 6o. SEMESTRE

UNIVERSIDAD PEDAGOGICA NACIONAL
UNIDAD 211


Habilidades que se deben obtener al implementar el Pep en la asignatura del español (aprendizaje de la lengua en los alumnos de nivel básico).


ALUMNA: ARCELIA GOMEZ CORTEZ
6º. Semestre

Introducción

En la educación preescolar, además de los usos del lenguaje oral se requiere favorecer la familiarización con el lenguaje escrito a partir de situaciones que impliquen la necesidad de expresión e interpretación de diversos textos.

Al igual que con el lenguaje oral, los niños llegan al jardín con ciertos conocimientos sobre el lenguaje escrito, que han adquirido en el ambiente en que se desenvuelven, por lo que saben que las marcas gráficas dicen algo, que tienen un significado y son capaces de interpretar las imágenes que acompañan a los textos, asimismo tienen algunas ideas sobre las funciones del lenguaje escrito.

La participación de los niños en situaciones en que hacen uso de estas formas de expresión oral y escrita con propósitos y destinatarios ayudan a su desarrollo y generan en él aprendizajes. Ya que los niños no pueden aprender a pensar lógicamente sin dominar el lenguaje.

Evidentemente algunos niños llegarán al preescolar con mayor conocimiento que otros sobre el lenguaje tanto oral como escrito, esto depende del tipo de experiencias que hayan tenido en su contexto familiar. Mientras más ocasiones tengan los niños y niñas de estar en contacto con textos escritos y de presenciar una mayor cantidad y variedad de actos de lectura y de escritura, mejores oportunidades tendrán de aprender. Por ello hay que propiciar situaciones en las que los textos cumplan funciones especificas, es decir, que les ayuden a entender para qué se escribe, vivir estas situaciones en la escuela es aún más importante para aquellos niños que no han tenido la posibilidad de acercamiento con el lenguaje oral y escrito en su contexto familiar.


Desarrollo

Las ideas de Vigotsky sobre la relación entre aprendizaje y desarrollo permiten explicar por qué es tan difícil la enseñanza no solo del lenguaje oral y escrito, sino de todos los ámbitos de desarrollo del ser humano.
Dadas las diferencias individuales, no es posible ofrecer recetas exactas para producir cambios en cada niño; no se le puede decir a un maestro: “si haces esto seis veces, todos y cada uno de los niños van a desarrollar esta habilidad en particular”.
La relación exacta entre aprendizaje y desarrollo puede ser diferente en cada niño. Los maestros debemos ajustar los métodos constantemente para adecuar el proceso de aprendizaje y enseñanza a cada niño, lo cual representa un gran reto para los docentes.
Se tiende a pensar que el lenguaje afecta, sobre todo el contenido del conocimiento de las personas; sin embargo, lo que sabemos y pensamos está influido por los símbolos y los conceptos que conocemos. Vigotsky creía que el lenguaje desempeña un papel aún más importante en la cognición. El lenguaje es un verdadero mecanismo para pensar, una herramienta mental; le lenguaje hace el pensamiento más abstracto, flexible e independiente de los estímulos inmediatos.
Los recuerdos y las previsiones son convocados por el lenguaje para enfrentar nuevas situaciones, por lo que éste influye en el resultado, cuando los niños usan símbolos y conceptos, ya no necesitan tener delante un objeto para pensar en él. El lenguaje permite imaginar, manipular, crear ideas y compartirlas con otros; es una de las formas mediante las cuales intercambiamos información; de aquí que el lenguaje desempeñe dos papeles:
1.- Instrumento en el desarrollo del conocimiento
2.- Parte del proceso cognitivo
Ya que el aprendizaje ocurre en situaciones compartidas, se vuelve una importante herramienta para la apropiación de otras herramientas de la mente.
Para compartir una actividad; debemos hablar de ella, de no ser así jamás sabremos si los significados atribuidos al lenguaje son los mismos para nosotros y para los demás.
El lenguaje facilita las experiencias compartidas necesarias para construir los procesos cognitivos. Las capacidades de habla y escucha se fortalecen en los niños cuando tienen variadas oportunidades de participar en las que hacen uso de la palabra con diversas intenciones: como lo es:
Narrar un suceso, una historia un hecho real o inventado, incluyendo descripciones de objetos, personas, lugares y expresiones de tiempo, dando una idea lo más fiel y detallada posible. La práctica de la narración oral desarrolla la observación, la memoria, la imaginación, la creatividad, el uso del vocabulario preciso y el ordenamiento verbal de las secuencias.
Conversar y dialogar sobre inquietudes, sucesos que se observan o de los que se tiene información. El dialogo y la conversación implica comprensión, alternancia de las intervenciones y formulación de preguntas precisas y respuestas coherentes, ya que de esta manera se propicia el interés, el intercambio entre quienes participan y el desarrollo de la expresión
Explicar las ideas o el conocimiento que se tiene cerca de algo en particular como es los pasos a seguir de un juego o experimento, las opiniones personales sobre un hecho natural tema o problema. Esta práctica implica el razonamiento y la búsqueda de expresiones que permitan dar a conocer y demostrar lo que se piensa, los acuerdos y desacuerdos que se tienen con las ideas de otros o las conclusiones que derivan de una experiencia, además, son el antecedente de la argumentación.
Presenciar y participar en actos de lectura y escritura permite a los niños percatarse, por ejemplo de la direccionalidad de la escritura, de que se lee en el texto escrito y no en las ilustraciones, de las diferencias entre el lenguaje que se emplea en un cuento y en un texto informativo, de las características de la distribución grafica de ciertos tipos de texto, de la diferencia entre letras, números y signos de puntuación, entre otras.
Escuchar la lectura de textos y observar como escriben la maestra y los adultos, jugar con el lenguaje para descubrir semejanzas y diferencias sonoras, reconocer que es diferente solicitar un permiso de manera oral que de forma escrita, intentar leer y escribir a partir de los conocimientos previos que tienen del sistema de escritura incrementando su repertorio paulatinamente, son actividades en las que los niños ponen en juego las capacidades cognitivas que poseen para avanzar en la comprensión de los significado y usos del lenguaje escrito, y para aprender a leer y escribir.
Experiencias como utilizar el nombre propio para marcar sus pertenencias o registrar su asistencia, llevar control de fechas importante o de horarios de actividades escolares o extraescolares en el calendario, dictar a la maestra un listado de palabras de lo que se requiere para organizar una fiesta, los ingredientes para una receta de cocina y el procedimiento para prepararla, o elaborar en grupo una historia para que la escriba la maestra y sea revisada por todos, son experiencias que permiten a los niños descubrir algunas de las características y funciones del lenguaje escrito.
Participar en situaciones en las que interpretan y producen textos, los niños no solo aprenden acerca del uso funcional del lenguaje escrito, también disfrutan de su función expresiva, ya que al escuchar la lectura de textos literarios o al escribir con la ayuda de la maestra expresan sus sentimientos y emociones y se trasladan a otros tiempos y lugares haciendo uso de su imaginación y creatividad.
El acto de escribir es un acto reflexivo, de organización, producción y representación de ideas. Los niños aprenden a escribir escribiendo para destinatarios reales. Si escribir es un medio de comunicación, compartir con los demás lo que se escribe es una condición importante que ayuda a los niños a aprender de ellos mismos. Los niños hacen intentos de escritura como pueden o saben, a través de dibujos, marcas parecidas a las letras o a través de letras, estos intentos representan pasos fundamentales en el proceso de apropiación del lenguaje escrito.
En síntesis, antes de ingresar a la escuela y de leer y escribir de manera convencional, los niños descubren el sistema de escritura, los diversos propósitos fundamentales del lenguaje escrito, algunas de las formas en que se organiza el sistema de escritura y sus relaciones con el lenguaje oral. En este descubrimiento los niños someten a prueba sus hipótesis, mismas que van modificando o cambiando en diversos niveles de conceptualización.
De acuerdo con los planteamientos anteriores, es necesario destacar que en la educación preescolar no se trata de que las educadoras tengan la responsabilidad de enseñar a leer y a escribir de manera convencional, por ello no se sugiere un trabajo basado en ningún método para enseñar a leer y escribir. Se trata de que la educación preescolar constituya un espacio en el que los niños tengan numerosas y variedad oportunidades de familiarizarse con diversos materiales impresos, para que comprendan algunas de las características y funciones del lenguaje escrito.


CONCLUSION

En la educación preescolar la aproximación de los niños al lenguaje escrito se favorecerá, mediante las oportunidades que tengan para explorar y conocer los diversos tipos de texto que se usan en la vida cotidiana y en la escuela, así como de participar en situaciones en que la escritura se presenta tal como se utiliza en diversos contextos sociales, es decir, a través de textos completos, de ideas completas que permiten entender el significado, y no de fragmentos como silabas o letras aisladas que carecen de significado y sentido comunicativo.

Por las características de los procesos cognitivos que implica la escritura y por la naturaleza social del lenguaje, el uso de las planas de letras o palabras, y los ejercicios musculares o caligráficos, que muchas veces se hacen con la idea de preparar a los niños para la escritura, carece de sentido, pues se trata de actividades en las que no se involucra el uso comunicativo del lenguaje, además de que no plantean ningún reto conceptual para los niños. El aprendizaje del lenguaje escrito es un trabajo intelectual y no una actividad motriz.

Como prioridad en la educación preescolar, el uso del lenguaje para favorecer las competencias comunicativas en los niños debe estar presente como parte del trabajo específico e intencionado en este campo formativo, pero también en todas las actividades escolares. De acuerdo con las competencias propuestas en este campo, siempre habrá oportunidades para promover la comunicación entre los niños.

Comprender y saber cual es la función del lenguaje escrito y del sistema de escritura es una prioridad no solo del nivel de educación preescolar, sino de la educación básica en general, pues con ello se pretende que los niños y las niñas sean competentes para expresarse y comunicarse de acuerdo a las exigencias de un mundo en constante cambio y que les lleve a insertarse de manera eficiente en la sociedad del conocimiento. Por lo tanto los docentes deben conocer, comprender y saber como intervenir en los procesos que realizan los niños y las niñas en su acercamiento por conocer las funciones y usos del lenguaje escrito y del sistema de escritura.

Es por ello que la educación preescolar tiene un valor fundamental en el desarrollo del lenguaje y la comunicación de los pequeños, al concluir este nivel educativo los niños y niñas deberán ser capaces de exponer, explicar, expresar y narrar sus ideas, emociones, pensamientos, vivencias y sentimientos de manera fluida, coherente y adecuada al contexto, es decir ser capaces de construir un discurso oral. En la medida en que los pequeños y pequeñas desarrollen lo más posible su lenguaje oral y con ello produzcan discursos será posible que estos discursos se transformen en texto escrito, es decir que los niños y niñas conozcan y sepan como y para que se produce el texto escrito y hagan sus propias producciones escritas, sean grafismos convencionales o no. Así mismo, también se pretende que los alumnos hagan interpretaciones de lo escrito, es decir que reconozcan que lo que se escribe se puede leer y con ello comprenda la importancia de la lectura y algunas de sus funciones.